Paola Bellinghelli, la madre del niño epiléptico de 18 meses secuestrado hace nueve días en su casa de la ciudad de Parma, en el norte de Italia, defendió públicamente a su marido, Paolo Onofri, quien es investigado por supuesta posesión de pornografía infantil. “En los días de silencio de prensa alguien aprovechó para sacar noticias falsas, tendenciosas y exageradas dirigidas a desacreditar sólo y exclusivamente la figura de mi marido”, dijo la mujer ante las cámaras de televisión. La noticia, según ella, “desvía la atención del vil delito cometido contra nuestro hijo”.