Lunes, 28 de noviembre de 2011

Por Pablo Vignone

Desde Paraná 5o9j

Fue el tercer título de Matías Rossi, después de los de 2006 y 2007 con Chevrolet, en el TC2000; es el cuarto piloto en sumar tres títulos en la categoría, después de Jorge Omar del Río, Juan María Traverso (que llegó a siete) y Gabriel Ponce de León.

Rossi se quedó con la corona por determinado. Ganó cuatro carreras en Paraná: las tres mangas del Súper 8 (sobre López, Ledesma y Canapino), con alguna maniobra recia incluida –como la que fabricó para rebasar al marplatense– y después la final (su tercer triunfo del año en 12 carreras) de largas, tensas 29 vueltas. Volvió a aparecer el Rossi de comienzos de año, el que aplastó en San Juan, el que no muestra fisuras, el que ganó primero la contienda psicológica y después dominó en la pista. Les puso la chapa a sus dos rivales en el torneo, su compañero Mariano Werner y Leonel Pernía, cuando se quedó con la pole position en el Súper 8. Ahí contuvo anímicamente a su compañero (que “en las últimas carreras había sido un poco más rápido que yo”, reconoció a Líbero) y transformó la carrera: eran los otros los que estaban obligados a derrotarlo.

Werner intentó el último esfuerzo en la exuberante primera vuelta, donde muchos se arriesgaron, y saltó del séptimo al tercer lugar. “Preocuparme, no –acota el flamante campeón– pero lo apunté, Mariano había ganado cuatro lugares y la carrera recién empezaba.” Pero Werner no tuvo tanto resto mecánico, no pudo escaparle al roce con Pernía en la vuelta 18. “Tuve un golpe con Pechito López que me dejó mal la dirección, después me tocó Pernía... Hice todo lo que pude.”

Peor le fue al tandilense, que tras una largada fulminante (de 15º a 8º), y con el auto recuperado tras los problemas de dirección que le impidieron clasificarse bien adelante, fue recargado con 30 segundos por ese toque a Werner: quedó 17º y perdió hasta el subcampeonato, a manos del entrerriano. “Lo perdí en la clasificación –dijo al borde de las lágrimas–. Voy a seguir peleando por el título.” Fue el segundo consecutivo que pierde en la última carrera del año.

Toyota sacó pecho, Honda se hundió, terminaron bien Chevrolet (con Canapino segundo en la carrera y cuarto en el campeonato) y Fiat (al podio con López), Ford pudo subir al podio con Silva y lo mismo sucedió con Peugeot, luego de otra buena carrera de Facundo Ardusso, uno de los talentos en ascenso más sólidos del TC2000.

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