Los vecinos del barrio presentaron un plan para reistrar el turismo, el tránsito y sobre todo la feria, para aliviar la sobresaturación de la zona. 5m91o
Lo que ocurrió es, a pequeña escala, lo que le pasó a Belgrano. Recoleta arrancó con la feria, siguió con una explosión de restaurantes, abrió el Design Center y luego el Village Cinema sobre Vicente López. Las calles y veredas siguen siendo las de siempre y sólo buenas ideas como el veredón frente al complejo de cines alcanzan a manejar el tránsito brutal de peatones. A ese barrio va mucha más gente de la que el barrio puede procesar.
Mientras que todavÃa quedan vecinos nostálgicos de cuando Recoleta era ânuestroâ barrio, el resto acepta el nuevo rol de la zona. Hace exactamente un año se realizaron las jornadas Recoleta Viva, en que Ciudad y vecinos hablaron por tres dÃas de problemas y soluciones. En una carta al CGP local, organizaciones participantes âAsociación Amigos de la Recoleta, Junta de Estudios Históricos de la BasÃlica del Pilar, Asociación Civil Respeto Urbano, Consejo Parroquial Nuestra Señora del Pilar, Compromiso por Recoleta, Amigos del Cementerio de Recoleta, Fundación Schapire, Asociación Verde Barrientos y Asociación Plaza del Arbolâ resumieron posiciones.
La propuesta de los vecinos es formar un Corredor Cultural Recoleta que istre los espacios que atraen a tanta gente. Esto une lo que algún funcionario ya olvidado âmerecidamenteâ quiso llamar âla milla de museosâ, tratando de hacer sonar las cuadras de Libertador como la Quinta Avenida de Nueva York, con las plazas, feria, centro cultural, Palais de Glace y calle de restaurantes. Lo primero que piden los vecinos es que se realice un estudio de impacto ambiental que oficialice lo que puede apreciarse a simple vista, que los espacios verdes están destruidos por el exceso de actividades.