Heredero de una âtimidez criminalmente vulgarâ que confiesa en la canción âHow Soon is Nowâ, Morrissey pasó la mayor parte de su vida entre las cuatro paredes de su casa en Davyhulme, ciudad vecina a Manchester. No resulta difÃcil imaginarlo tirado en su cama escuchando los éxitos de Sandie Shaw âmuchacha que en los â70 sonaba en todas las radios con canciones melodramáticas de Burt Bacharachâ y vagando por los oscuros laberintos paranormales de la mano de los textos de Oscar Wilde. Penetrado por la cultura popular e inspirado también por los textos de Goethe y de Thoureau, ese chico pálido de ojos verdes que gusta vestir ropas con flores âwildeanasâ empezó a soñar la manera de salirse de las pequeñas calles de su ciudad por las que circulan los muchachos y muchachas âordinariosâ que describe en su canción âOrdinary Boysâ. Con la consigna âLa mediocridad es una enfermedad terminalâ buscó un lugar especial en la música y aquà está. La musa punk Patti Smith marcó sin proponérselo el nacimiento de The Smiths, una de las bandas pop más influyentes del Reino Unido, donde unos jóvenes Stephen Patrick Morrissey y Johnny Marr lograban hacerle frente a la ola pop de principios de los â80 con un estilo que podÃa considerarse conservador, old fashion y reticente a usar sintetizadores, pero que trajo aires nuevos. 553c14
Pero eso fue hace mucho tiempo. Luego de una tormentosa y confusa separación, digna de culebrones, Morrissey sacó en 1988 Viva Hate, su primer trabajo solitario, donde echa mano a sus deseos más Ãntimos, intrÃnsecamente polÃticos. Un ejemplo es âBrake up the Familyâ, mantra que incita a traicionar a ese estandarte del conservadurismo que ya era metástasis en los paÃses de habla inglesa. También recurre a su memorabilia hollywoodense y graba el video de âSuedeheadâ en Fairmount, Indiana, cuna de James Dean, cuya imagen icónica se diluye entre pinos y nieves inmaculadas. En el mismo disco se da el lujo de mandar a Margaret Thatcher a la guillotina: âLa gente buena tiene un sueño maravilloso, Margaret en la guillotina. Porque gente como vos me tiene cansado, ¿cuándo morirás?â. En el single âBona Dragâ usa jerga gay juvenil influenciada por las emisiones radiales de Kenneth Williams; en âMy Love Lifeâ le pide a âalguienâ que âsi ama a uno, puede amar a dosâ. También les avisa a todos en la canción âEnd of the Family Lineâ que no va a traer descendencia y en la nuevÃsima âIâm Throwing my Arms around Parisâ decide que va a abrazar a ParÃs porque sólo la piedra y el acero aceptan su amor.
Desde la tapa del primer disco de The Smiths âuna foto del torso desnudo de la bomba sexual Joe Dallesandro, tomada de la pelÃcula Flesh, de Andy Warholâ, Morrissey empezó a coquetear con una idea que conmocionaba a los otros de la banda: âNo sos tan hétero como creésâ. Las humoradas y los guiños gay âmuy transgresores para la épocaâ siguieron apareciendo en las tapas de los singles: la transexual Candy Darling, galanes cinematográficos en sugestivas poses como Murray Head y Dudley Sutton âquien encarnó a un motoquero gayâ y hasta un hombre completamente desnudo para la tapa del single âHandsome Devilâ.
Ya en 1984, Morrissey aplanó las diferencias diciendo que se negaba a âreconocer los términos hétero, bi y homosexualâ, porque âtodos tenemos exactamente las mismas necesidades sexualesâ. Esta predicción transgenérica coloca a Morrissey en el olimpo. Leo GarcÃa supo resumir magistralmente la liaison entre los chicos hétero atraÃdos por la figura de Morrissey bajo el influjo de su pertenencia a The Smiths y los chicos gays que se identifican con su imagen frágil, solitaria âque carga la prohibición explÃcita de amarâ, y muchas veces andrógina y autoerótica.
Morrissey, al ser cuestionado alguna vez sobre por qué no escribÃa música para mujeres, respondió que él pensaba que sà lo hacÃa. AllÃ, según sus propias palabras, descubrió que el hecho de escribir música sin especificar géneros no implicaba en sà mismo una recepción por parte de todos en igual medida. Basta con mirar un recital para observar la iración cuasi homoerótica proveniente de sus fans hétero, por lo que no es descabellado que una tarde entre amigos diversos se convierta en un encuentro erótico mientras la novia del chongo está haciendo las compras en avenida Santa Fe.
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