âEmpiezo a sentirme adulto âdice Pablo Ruiz, entrecortado por la risaâ. Fui de madurar muy lento. Tuve diez años de búsqueda, sin nada claro. SabÃa que amaba cantar, pero era un peso manejar mi carrera. Todo se me iba de las manos, desde el manager hasta el dinero. Le daba prioridad a salir, a comprarme ropa. En Festilindo (pionero entre las voces aguditas y la mirada perdida, pariente lejano de los Menudo) yo habÃa tenido un éxito con âEnamorado de mi vecina que vive al ladoâ; llegué a la final con Ivana Rossi y Débora Turza, que ahora protagonizan en el teatro off. Del â83 al â85 me pasaron un montón de cosas. 6w3i55
âEstuve en Señorita Maestra.
â¿Vos sos Pablito Ruiz? Te felicito, como bailás, lindo. La verdá que te merecÃas un puntaje más alto. Yo no sé qué vieron... âinterrumpe una mujer de unos sesenta años en âlo mejorâ de la conversación, pero se va rápido ante cierta indiferencia de Pablito, que nunca es demagógico en el trato.
â... era un bolo el de Señorita Maestra, de vez en cuando, en la clase de canto de Jacinta Pichimahuida, yo era un miembro del coro. Volvà a hacer giras, nos hicimos hiperfamosos con Julieta RocÃo y Sebastián Costa. Y en la final de Festilindo, en Ferro, juntamos unas 20 mil personas; ahà me ve la gente de la discográfica EMI y nace el disco Pablito Ruiz (su álbum debut). Con âMi chica idealâ (âYo te amo... de manera especial...â, decÃa la letra infaltable en los asaltos de los años â80) podrÃa haber llegado lejos, muy lejos, pero acá no se escuchaba tanta música latina. Por algo pasan las cosas. Sentà que estaba adelantado a mi tiempo. Y hoy se nota que la gente respeta más a un artista de mi estilo, ambiguo...
âComo Mika, por ejemplo, que ahora está tan de moda. O como Miranda!, que son chicos re-ambiguos. Yo tengo algo de eso.
âMirá, no me gusta ponerme tÃtulos. Yo no me oculto porque en mi vida tuve experiencias de todo tipo; salà con chicas y salà con tipos. De repente, todavÃa no está abierta la gente a aceptar que son otros tiempos y hay mucha diversidad sexual: están el drag queen, el transgénero, el travesti...
âEn mi forma de ser, de bailar, en mis rasgos hay una ambigüedad. Me interesan Freddie Mercury, Miguel Bosé; o Sandro, que es un poco ambiguo: en su forma de bailar, por ejemplo. A él lo aceptan mejor y no lo cuestionan por los años que lleva cantando. Pero hoy en dÃa nadie se mete tampoco conmigo, estoy bien plantado.
âA mà me están glorificando. Tinelli se tenÃa que adaptar a los tiempos de hoy y se adaptó. Entre los soñadores hay muchos gays, gente de todo tipo...
âYo respeto. Siento que hoy en dÃa mi público es mixto, desde los hétero hasta las chicas. Me siento halagado por todos, porque hoy soy aceptado por todo tipo de público... Pero hay prensa muy chota. A Intrusos, por ejemplo, ya no voy. Mi madre estaba re-sacada cuando pasó...
âEso fue cuando ya no vivÃa en México. De hecho, en una fiesta de Halloween estábamos disfrazados de mujeres y, sÃ, me habré disfrazado tres o cuatro veces en mi vida, pero yo no era el de esas fotos. Me dije: bueno, ya está, después de esto, qué más van a decir... Y no hubo mal que por bien no viniera, porque gracias a la maldita foto, o bendita, se me abrió trabajo en Chile y estuve en Susana Giménez, también gracias a eso (N. de la R.: se refiere a una entrevista en el living y a su posterior participación en âEl circo de los famososâ). Me empezaron a pasar en TVR. Ahà empieza la insistencia por saber si soy o no gay, y me quedo sorprendido por la agresión. Sea o no sea, me estaban atacando.
âFue lo que más miedo me dio e hizo a la compañÃa discográfica retroceder dos pasos. Además, yo empezaba a exigir más y ellos querÃan seguir produciendo discos de dos pesos. Dejé de ser un negocio redondo para ellos, y me congelaron el contrato. No me fue tan bien como antes. En México hacÃa fiestas patronales de pueblos, que se organizan durante todo el año. Se me fue cerrando el camino,
âY hoy que adquiriste otra visibilidad pública, más asentado, ¿te gustarÃa enmarcar al hijo que querés tener con MarÃa Fernanda Callejón en una militancia a favor del derecho de las parejas gays a la adopción compartida?
âEstoy a favor, totalmente. El hijo es una fantasÃa que tenemos los dos. Cuando ella estaba en Las gatitas y los ratones de Porcel, yo cantaba en FinalÃsima. En la disco Cinema, un paparazzo nos sacó una foto besándonos, y se armó un romance platónico, inventadÃsimo, chistoso. Ella tiene muchas ganas de ser mamá, nunca quedó embarazada, o quedó y lo perdió, y eso le duele. En âEl circo de los famososâ lo habló y lloró. Estaba Leticia Brédice, y empezó a llorar también, y MarÃa Fernanda decÃa que no le quedaba mucho tiempo. Todo era por la nena hermosa de la (Paula) Trapani. Y le dije: âLoca, te doy mi esperma, ¿cuál es el problema?â.
âNo sé, yo amo a los chicos, me encantan.
âSÃ, pero gran parte de la sociedad es pacata. Mientras haya amor, por qué no...
âYa me tiene harto el boliche. Me aburrà de todo eso. Nunca estás con nadie de verdad; si sale algo, es muy efÃmero. Me buscan los pibes, las pibas, los travas. Pero es terrible. Voy para divertirme con mis amigos. Y, sÃ, es como una adicción...
âSÃ, pero no terminó muy bien. Hubo un varón y una mujer. Fue en una discoteca. Pero no se consumó porque no lo pueden aceptar y se retiran, es too much. âNo quiero romper la imagen de mi Ãdoloâ, me dicen. Prefieren dejarlo asÃ. Hay gente enferma que viene y me dice que mis temas le alegran la vida, gente con problemas mentales.
âSi recibiera una convocatoria, cantarÃa en una Marcha del Orgullo. Por ahà no se animan a pedir mi apoyo. Leo GarcÃa siempre va. Con él nos conocimos en el Club 69, me dijo que le encantaba mi música, que yo era uno de los pioneros. Y nos hicimos amigos. Ahora cantamos âMorrisseyâ a dúo.
âLos temas no tienen un perfil sexual. Pero algunos van a prender especialmente entre los gays. No le pongo nombre a la letra. Hay una, sin embargo, que les gusta especialmente a los chicos: âTe miro a los ojos y estás tú, en mis ideas, en mis palabras, en mi inspiración. Miro a la gente y eres tú...â.
âEs idea mÃa para universalizar. Hablo de âtúâ por mis años en México. Pero en otros temas digo âvosâ...
âVa a ser la gran fiesta de cumpleaños, nada raro. Pero, ¿qué dejarÃamos para el misterio? A la intimidad yo no la vendo.
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