Para el cierre todavía quedaba suspenso. Porque con dos puntos de ventaja, Karl Anthony Towns falló un tiro libre que le dio a Tyrese Haliburton la chance de ganarlo con un triple. El lanzamiento del armador de Indiana pegó en el aro y se elevó más de un metro pero luego entró limpio para desatar la euforia de los suyos. El base celebró tomándose el cuello, un festejo icónico que hacía el ídolo de la franquicia Reggie Miller. Sin embargo, con su pie derecho pisó la línea de tres, lo que derivó que el partido se fuera a suplementario.
Más allá de ese detalle, lo sucedido recordó aquel memorable partido en el que Miller anotó ocho puntos en 13 segundos para dar vuelta un partido que lo Knicks tenían casi ganado, como sucedió anoche. Por eso, el homenaje de Haliburton no se hizo esperar, aunque no hubo pelea con Spike Lee, el director de cine fanático de Nwe York que se peleaba con el tirador de Indiana en casi todos los cruces.
En el suplementario, a pesar de que Nueva York volvió a tomar ventajas en el comienzo, prevaleció Indiana, que terminó ganando 138-135 y selló su tercera remontada de siete o más puntos en el último minuto en esta postemporada, después de las que había logrado ante Milwaukee Bucks en la primera ronda y ante Cleveland Cavaliers en la semifinal de Conferencia. El próximo encuentro de la serie será el viernes, de nuevo en el Madison Square Garden. En tanto, esta noche se llevará a cabo el segundo partido de la llave que Oklahoma le está ganando 1-0 a Minnesota en la final del Oeste.
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