El graupel ocurre cuando “las gotas de lluvia se congelan y forman un hielo pequeño y blando, del tamaño de un grano de arroz o una arveja, que se desarma al tocarlo”.
Cindy Fernández, meteoróloga del SMN, precisa que el fenómeno se produce en el momento en que “un copo de nieve parte de la nube y se derrite porque se encuentra con aire cálido, pero cerca de la superficie se encuentra con aire muy frío, la gota se congela como un granizo”.
A diferencia del granizo, que es de mayor dimensión y más sólido, el graupel mide entre 2 y 5 milímetros y se deshace al tomar o con alguna superficie, por lo que no genera daños materiales.
A su vez, Fernández, aclara que el aguanieve, a diferencia del graupel, ocurre cuando el aire está frío pero no tanto, “entonces algunos copos se derriten y otros, los más grandes, llegan a la superficie”.
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